Velan a hermanos Reyes frente a la Fiscalía
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Ciudad Juárez, Chihuahua.- Los dos hermanos Reyes que fueron ‘levantados’ y posteriormente asesinados fueron trasladados a las instalaciones de la Fiscalía de la zona norte donde son velados por sus familiares.
Aquí se realiza una misa en honor a los hermanos Elías Reyes y María Magdalena Reyes Salazar, mientras que el de Luisa Ornelas, esposa de Elías, fue llevada a Caseta a petición de su familia.
Los cuerpos de los hermanos arribaron a las instalaciones de la Fiscalía a las 4:00 de la madrugada y será a las 10:00 de la mañana que sean trasladados al Valle de Juárez donde finalmente serán sepultados.
Aquí Sara Salazar madre de los hermanos pidió justicia para sus hijos y detener a los asesinos, asimismo con lagrimas cuestionada por qué le habían matado a sus hijos.Acaban sicarios con familia en Chihuahua
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| Sara Reyes (der.), quien ha sufrido el asesinato de cuatro hijos y un nieto, regresó ayer mismo a Ciudad Juárez. Foto: Alejandro Mendoza |
Ciudad Juárez, México (26 febrero 2011).- En un año, la familia Reyes ha sufrido la ejecución de cinco de sus integrantes.
Ayer, tras 18 días de haber sido plagiados, tres familiares de la activista Josefina Reyes Salazar fueron hallados muertos en la carretera Juárez-Porvenir, en el Municipio de Guadalupe Distrito Bravos.
Reyes Salazar inició en 2008 protestas por la desaparición de uno de sus hijos. En enero de 2010 fue ejecutada, y en agosto de ese mismo año, su hermano Rubén también fue asesinado.
El 7 de febrero, Magdalena y Elías Reyes Salazar, de 44 y 57 años, así como la esposa de este último, Luisa Ornelas, de 53, fueron secuestrados en la vía donde aparecieron ayer sus cuerpos sin vida.
Tras el plagio, Sara Salazar Hernández, madre de dos de ellos, inició una huelga de hambre frente a la subprocuraduría de Justicia de Chihuahua para exigir la aparición de sus familiares.
Una semana después, un grupo de desconocidos incendió su casa en Ciudad Juárez.
El lunes, Salazar Hernández trasladó su protesta a la sede del Senado.
Ayer, la familia Reyes responsabilizó al subprocurador de Chihuahua, Jorge González Nicolás, de la muerte de los tres integrantes encontrados ejecutados en la madrugada.
El exterminio de la familia Reyes Salazar comenzó en 2009 con el asesinato de Julio César, hijo de Josefina Reyes, una luchadora social que desde la década de los 90 había denunciado abusos laborales en las maquilas, feminicidios en el Valle de Juárez y la instalación de un tiradero nuclear en Sierra Blanca.
Su labor como activista se desarrolló sin mayores inconvenientes hasta que los militares llegaron como parte del Operativo Conjunto. Los uniformados incurrieron en violaciones como tortura y detenciones arbitrarias, de las cuales la Comisión Estatal de Derechos Humanos documentó más de 150 casos.
Además, Josefina los responsabilizó del asesinato de su hijo y a raíz de esas denuncias, comenzaron las amenazas en su contra.
En septiembre del 2009, Miguel Ángel, otro hijo de Josefina, fue detenido por su presunta participación con el crimen organizado. La activista pidió que se le procesara conforme a derecho y finalmente fue liberado. Antes de la detención aparecieron amenazas de muerte en contra de distintos habitantes del Valle de Juárez, entre ellos Josefina.
Su casa fue allanada tres veces por soldados y, finalmente, el 3 de enero del 2010, la activista fue asesinada.
"Te crees muy chingona porque estás con las organizaciones", le dijo uno de los asesinos antes de dispararle a quemarropa afuera de un puesto de barbacoa, en el Municipio de Guadalupe, donde vivía.
Las investigaciones sobre las muertes de Julio César y Josefina no tenían avance alguno cuando en agosto del 2010, su hermano Rubén fue asesinado.
La violencia en contra de la familia escaló a su punto más alto la madrugada de este viernes, cuando los hermanos Malena y Elías, así como Luisa, su esposa, fueron encontrados sin vida.
Dos semanas antes, el 7 de febrero de este año, habían sido desaparecidos cuando se dirigían rumbo al Valle de Juárez acompañados de su madre Sara Salazar y una nieta de 11 años.
Esa tarde, una camioneta se les cerró y de ella descendieron seis hombres, cuatro encapuchados y dos con el rostro descubierto, echando balas al cielo.
Los hombres jalaron a doña Sara de la camioneta y ella alcanzó a agarrar a su nieta. Ambas terminaron tiradas sobre la arena, a un costado de la carretera, mientras los hombres armados se llevaron a Malena, Elías y Luisa.
La familia instaló un plantón en Ciudad Juárez y uno más en la Ciudad de México para exigir a las autoridades la presentación con vida de Marisela, Elías y Luisa Ornelas.
Organizaciones de la sociedad civil han exigido al Gobierno federal que aclare los homicidios de la familia y despeje toda duda sobre la participación del Ejército en las agresiones.
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Ciudad Juárez, Chihuahua.- Entre llantos por la pérdida de sus seres queridos, la madre y hermanos aclaman justicia para Elías Reyes, María Magdalena Reyes Salazar y Luisa Ornelas, esposa de Elías, quienes ‘levantados’ y asesinados por un comando armado el pasado 7 de febrero en el Valle de Juárez.
Aquí dieron a conocer que no dejarán de luchar hasta conseguir justicia y la detención de los asesinos, “están matando a gente inocente, mujeres y niños, tenemos que unirnos y alzar la voz”, expresaron.
Reyes Salazar inició en 2008 protestas por la desaparición de uno de sus hijos. En enero de 2010 fue ejecutada, y en agosto de ese mismo año, su hermano Rubén también fue asesinado.
El 7 de febrero, Magdalena y Elías Reyes Salazar, de 44 y 57 años, así como la esposa de este último, Luisa Ornelas, de 53, fueron secuestrados en la vía donde aparecieron ayer sus cuerpos sin vida.
Tras el plagio, Sara Salazar Hernández, madre de dos de ellos, inició una huelga de hambre frente a la subprocuraduría de Justicia de Chihuahua para exigir la aparición de sus familiares.
Una semana después, un grupo de desconocidos incendió su casa en Ciudad Juárez.
El lunes, Salazar Hernández trasladó su protesta a la sede del Senado.
Ayer, la familia Reyes responsabilizó al subprocurador de Chihuahua, Jorge González Nicolás, de la muerte de los tres integrantes encontrados ejecutados en la madrugada.
El exterminio de la familia Reyes Salazar comenzó en 2009 con el asesinato de Julio César, hijo de Josefina Reyes, una luchadora social que desde la década de los 90 había denunciado abusos laborales en las maquilas, feminicidios en el Valle de Juárez y la instalación de un tiradero nuclear en Sierra Blanca.
Su labor como activista se desarrolló sin mayores inconvenientes hasta que los militares llegaron como parte del Operativo Conjunto. Los uniformados incurrieron en violaciones como tortura y detenciones arbitrarias, de las cuales la Comisión Estatal de Derechos Humanos documentó más de 150 casos.
Además, Josefina los responsabilizó del asesinato de su hijo y a raíz de esas denuncias, comenzaron las amenazas en su contra.
En septiembre del 2009, Miguel Ángel, otro hijo de Josefina, fue detenido por su presunta participación con el crimen organizado. La activista pidió que se le procesara conforme a derecho y finalmente fue liberado. Antes de la detención aparecieron amenazas de muerte en contra de distintos habitantes del Valle de Juárez, entre ellos Josefina.
Su casa fue allanada tres veces por soldados y, finalmente, el 3 de enero del 2010, la activista fue asesinada.
Actualmente los cuerpos de Elías Reyes, María Magdalena Reyes Salazar se encuentran a las afueras de la Fiscalía de la Zona Norte, posteriormente a las 11:00 de la mañana serán trasladados al poblado de Guadalupe donde serán enterrados.
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Ciudad Juárez, Chihuahua.- En punto de las 11:00 de la mañana partieron los cuerpos de los hermanos Reyes en dos carrosos de las instalaciones de la Fiscalía para dirigirse al poblado de Guadalupe Donde serán sepultados por sus familiares.
Previamente a la salida de los cuerpos de Elías Reyes y María Magdalena Reyes Salazar de la Fiscalía, familiares realizaron una misa de cuerpo presente, aquí pidieron el descanso de los hermanos Reyes.
Mientras que a su vez un grupo de jóvenes gritaban con coraje que su muerte no sería en vano y no descansarían hasta hacer justicia por sus asesinatos.
Aquí Sara Salazar madre de los hermanos pidió justicia para sus hijos y detener a los asesinos, asimismo con lagrimas cuestionada por qué le habían matado a sus hijos.
Los cuerpos partieron de la Fiscalía en dos carrosas y realizarán un recorrido en el Valle de Juárez lugar donde defendieron a los habitantes y lucharon por sus derechos humanos.
Se informó que antes de ser sepultados se trasladarán a la casa de sus abuelos y su madre por última vez.
